En octubre de 2012, quedó disuelta la Agencia Regional de la Energía, un instrumento eficaz que se constituyó en 1999 para promover las energías renovables. El Gobierno de Emiliano García-Page recupera las funciones de la Agencia de la Energía encuadrándolas dentro del ISFOC (Instituto de Sistemas Fotovoltaicos de Concentración). Para ello, modifica el objeto de este organismo, asignándole funciones de investigación y desarrollo de tecnologías industriales, consultoría e ingeniería en materia de eficiencia y ahorro energético, fomento del uso racional de la energía, así como la función de elaboración de estadísticas.
En noviembre de 2019, se aprobó el relevo en la Presidencia del Consejo de Administración del Instituto de Sistemas Fotovoltaicos de Concentración, que recae en el consejero de Desarrollo Sostenible. El ISFOC está en el epicentro de la política de transición energética y cuenta con un presupuesto de casi 9 millones de euros para el año 2020.