El Gobierno de Castilla-La Mancha, con la Estrategia Regional de Cuidados Paliativos, pretende sentar las bases de la atención paliativa en toda la región y homogeneizarla, basándose en una atención integral, centrada en el paciente y sus necesidades, y en donde los cuidados se lleven a cabo en el momento, lugar y dispositivo adecuado y con los recursos necesarios. Asimismo, el Plan de Salud Horizonte 2025, aprobado en Consejo de Gobierno en marzo de 2021, incluye entre sus líneas de trabajo el desarrollo de un "Plan de abordaje integral de la cronicidad y prevención de la fragilidad" que se marca entre sus objetivos prioritarios "definir un modelo de atención en el periodo final de la vida, para mejorar la calidad de vida de las personas que precisan cuidados paliativos y la de sus familias".
Así, el Plan de Salud enuncia que los cuidados paliativos deben incluir a todas las personas que lo precisen. Asimismo debe adecuarse un nivel específico de atención ante situaciones de especial complejidad con una atención continuada, experta y de alta calidad.
La finalidad de la aplicación de los cuidados paliativos es lograr la mejor calidad de vida y el máximo confort a la persona enferma y a su familia, sin intentar alargar la supervivencia, atendiendo las necesidades físicas, psicológicas, sociales y espirituales del paciente y sus familiares, y si es necesario, el apoyo incluye el proceso de duelo.
En este sentido, los cuidados paliativos son un elemento cualitativo esencial del sistema de salud. La aplicación de los mismos es una de de las prioridades para la administración sanitaria, que deben garantizar su adecuado desarrollo en cualquier lugar, circunstancia o situación.
En el marco de la pandemia por covid-19, la Dirección General de Cuidados y Calidad ha mantenido en junio de 2020 una reunión con la Red de expertos de Cuidados Paliativos del SESCAM para analizar la evolución del cronograma de la Estrategia de Cuidados Paliativos en la región.
