En el período comprendido entre 2019 y el tercer trimestre de 2022 se ha pasado de disponer de 809 dispositivos de Teleasistencia Avanzada instalados a contar con más de 3.000, en concreto 3.055. De entre los dispositivos destacan los detectores de fuego y humo con 1.409 dispositivos instalados, los 671 detectores de caídas o los 389 detectores de gas. Simultáneamente se avanza en la tecnología digital, de modo que en 2019 había tan sólo 119 terminales digitales instalados, de los 44.230 totales, siendo el resto analógicos. A 30 de septiembre de 2022 se dispone de 50.220 terminales instalados, de los cuales 6.126 son terminales digitales, lo que representa el 12% del total.
Adicionalmente, el Gobierno de Castilla-La Mancha impulsa el Plan de Telecuidado Avanzado, esta iniciativa transformadora incluye una revisión del modelo de atención a las personas apoyado en el uso de nuevas tecnológicas y supone un avance esencial en el sistema de teleasistencia implantado hasta ahora en la región, ya que se pasa de una asistencia reactiva a una asistencia proactiva ante las necesidades de las personas.
Los objetivos generales del proyecto son: desarrollar una solución tecnológica integrada y transformadora que apoye la evolución del modelo de atención en entornos rurales garantizando el adecuado acceso y respuesta a las necesidades asistenciales de la población de Castilla-La Mancha, mejorando su calidad de vida y promoviendo un uso más eficiente de los recursos públicos; aproximar y mejorar la disponibilidad de recursos y servicios en entornos rurales y en riesgo de despoblación para garantizar la calidad de vida y la igualdad de oportunidades, fomentando en última instancia el crecimiento de la población; conseguir que las personas con necesidades de cuidados prolongadas o temporales por causas sobrevenidas permanezcan independientes y con sensación de seguridad en sus hogares, mejorando la experiencia de atención mediante el uso de tecnologías innovadoras; combatir la soledad y el riesgo de aislamiento, creando un ecosistema de cuidados integral en el que la familia, vecinos, amigos y cuidadores locales desempeñen un papel activo.
Este Plan se enmarca dentro del Mecanismo de Recuperación, Transformación y Resiliencia la Comunidad de Castilla-La Mancha, para el que se destina un importe de 12,5 millones de euros para su implantación, en el que se está trabajando para incorporar prestaciones distintas a las recogidas en el contrato actual, como los domicilios sensorizados, acompañamiento a las personas solas en zonas despobladas y telecuidados integrados, entre otros.